Elecciones presidenciales

 en Colombia

Ayer asistí gracias al Alumni de Inalde al mejor análisis político que he visto en años y de las notas que tomé quiero compartir alguna perspectiva, que si bien no es de mi autoría, la comparto casi al 100%.

Tenemos dos países, uno político en donde unos quieren que no siga gobernando el uribismo y otros no quieren que suba Petro, y otro no político que no se manifiesta en posiciones como el país político, sino que se preocupa e intenta hacer propuestas en los temas que cree son los más relevantes para el país, como la corrupción, la seguridad y el desempleo. El país político, en términos generales, está en las redes sociales y particularmente en Twitter, y ya sabe por que votar, son de izquierda o de derecha y ya nadie los va a convencer de cambiar su posición. Los candidatos le hablan a este país político solo por que los ven como influenciadores de los del país no político y por eso les ponen mensajes fáciles de aprender y repetir, como aquel de que nos vamos a volver Venezuela si no votamos por… Este país representa entre el 15 y el 20% de los potenciales votantes. El resto es el país no político, dentro del que el 50% de este son personas que no votan, el 30% decide tarde, la mitad decide el último mes y el 10% la última semana! Este país es el del voto útil, es influenciable y aun no sabe por quien votar, pero si, por quien nunca votarían.

En las últimas encuestas, hay que atender a que el 59% de las muestras manifiesta que no votará y entre el 41% que si lo harán, el 35% lo hará en blanco, si las elecciones fuesen hoy.

Lo que tienen en común los dos países es que responden a emociones y por esta razón, la estrategia de los candidatos es apelar a la clásica de las películas de Disney, en la que siempre hay un villano, una princesa y un héroe. Por eso Uribe ganó, pues uso como enemigo en su estrategia a las FARC y apeló a la emoción del miedo para hacerse elegir siendo él, el salvador. Por eso Claudia López ganó, poniendo como enemigo a la corrupción y usando la emoción de la indignación para hacerse elegir. El enemigo de Mockus era la falta de educación y la emoción era la asociada a la consciencia. Petro usa la desigualdad como villano y apela al resentimiento como la emoción que hace que voten por él. De la misma forma, Trump puso de villanos a los inmigrantes y apeló a la discriminación y el odio como las emociones que le ayudarían a ganar. El tener enemigos comunes, permite generar clusters o segmentos al político y ofrecerles un marketing mix diferenciado para cada cluster, conocida táctica en marketing que conocemos como targeting comportamental.

Hoy tenemos cerca de 15 precandidatos, desde la extrema izquierda hasta la extrema derecha y un outsider que es Rodolfo Hernandez. Los podemos agrupar en la izquierda (2 candidatos), la centro izquierda desde Robledo hasta Gaviria, la centro derecha de Peñalosa a Fico y la extrema derecha del CD. La izquierda juega a derrotar al uribismo, la centro izquierda a derrotar los extremos y la polarización, la centro derecha a derrotar el populismo de Petro, la extrema derecha a derrotar a Petro para no volvernos Venezuela (Con todo el respeto por nuestro hermano país) y Rodolfo a derrotar a los políticos corruptos. Dependiendo de lo que pase en las próximas semanas, los grupos de candidatos se pueden mover, por ejemplo llevando a Peñalosa y Echeverri a la coalición de la esperanza o moviendo a Char y Fico a la extrema derecha. Así, podríamos ver candidatos fijos (no precandidatos) a Petro y Rodolfo; Galán, Fajardo y Gaviria en la disputa de la candidatura de centro izquierda, Yo creo que pasará Galán; Fico y Peñalosa definiendo el candidato de centro derecha y David Vargil u Oscar Iván Zuluaga o eventualmente Char como candidato de la extrema derecha. También podría suceder que los dos centros se uniesen o que la centro derecha y la extrema derecha terminasen unidos para la primera vuelta.

Siendo esta una elección donde los problemas reales y las propuestas ideológicas ya no cuentan para nada, parece que esta se trata de evitar que otros ganen y entonces la emoción que se trabajará es la de miedo y terminará ganando probablemente quien menos resistencia genere, esto quiere decir que si el centro pasa a segunda vuelta, gana. Las elecciones se nos volvieron de tres vueltas. En las consultas ganarán los conocidos; en primera vuelta ganarán los que emocionen y en segunda vuelta el que menos temor genere.

Petro tiene una imagen desfavorable mayor que la favorable, por la que tiene un techo que no le permitirá ser presidente de los colombianos. Galán es conocido y tiene 16 puntos a favor entre su imagen positiva y negativa, así que tiene buena probabilidad de ganar su consulta y si logra emocionar, que no le es fácil, será nuestro próximo presidente. Fajardo también está en su techo ya, de manera que no le ganará a Galán en su consulta. Oscar Iván tiene 30 puntos negativos, es decir una imagen desfavorable de 46 y una favorable de solo 17, luego parece que no tendría nada que hacer. A Fico lo conoce solo el 20% del país y no tiene espacio entre su imagen positiva y negativa. Toda la derecha se ve además afectada por la brecha de imagen negativa vs positiva del Presidente Duque de más de 40 puntos.

En términos cuantitativos, Petro tendría entre 5 y 5,5 millones de votos; la coalición de la esperanza entre 6,5 y 7; la centro derecha entre 4,5 y 5; la extrema derecha 3 millones y Rodolfo 1,5.

Para finalizar, y esto ya es de mi cosecha, creo que se puede concluir que si la segunda vuelta es de extremos, iremos hacia la izquierda y de otra parte si gana el que menos resistencia genere, nuestra alternativa, y respeto opiniones distintas, debe ser Galán!